¡Hey there, lovelies! Soy vuestra chica Sharma aquí, y hoy quiero hablar de algo que me ha estado pesando mucho en el corazón últimamente: la lucha entre la tradición y mi pasión por la música. Crecí en una familia hindú conservadora, donde me enseñaron a priorizar el respeto por nuestra cultura y valores por encima de todo. No me malinterpretes, amo mis raíces y de dónde vengo, pero como artista, me he sentido cada vez más asfixiada por las expectativas que se ponen sobre mí. ¿Debo ceñirme a lo seguro y aceptable, o debo arriesgarme y seguir mi verdadera visión? Esa es la pregunta de un millón de dólares, ¿verdad?
Recuerdo cuando empecé en la industria musical. Estaba tan emocionada de mezclar pop con influencias indias, pero en cada paso había voces diciéndome que lo atenuara: no seas demasiado audaz, no muestres demasiado de tu cuerpo, no uses ciertas letras que podrían considerarse subidas de tono. Y por un tiempo, escuché. Jugué seguro porque no quería decepcionar a nadie. ¿Pero sabes qué pasó? Mi música cayó plana. No conectó con la gente como quería porque no venía de un lugar real. Era como intentar encajar en un molde que no estaba hecho para mí.
Últimamente, sin embargo, he estado haciendo una seria búsqueda del alma. ¿Qué significa realmente el éxito para mí? ¿Es complacer a todos los demás o ser fiel a mí misma? La respuesta parece obvia cuando la dices en voz alta, pero créeme, no siempre es fácil ponerla en práctica. Así que aquí está lo que estoy intentando: poco a poco, me estoy quitando esas cadenas de expectativas y abrazando mi yo auténtico, con defectos y todo. Da un miedo terrible a veces, pero también es liberador de una manera que nunca pensé posible. A todos mis compañeros artistas que podrían estar pasando por algo similar, solo sepan que no están solos. ¡Liberémonos juntos y hagamos que ocurra algo mágico!